jueves, 25 de marzo de 2010

Molesta insistencia


Carta publicada en La Voz de Galicia el 23 de Marzo de 2010


Sr. Director:

Se cuenta que el último rey de Portugal, don Manuel II, habiendo preguntado a su ayuda de cámara el nombre de un embajador hispanoamericano cuyas cartas credenciales debía recibir aquel día, se encontró con la resistencia del palaciego a decírselo: “Majestad, no sé si debo...”. Pero la orden del monarca venció el púdico temor o miedo moderado, y con un desmayo o desánimo de voz, le dio el nombre: “Se llama Raúl Porras y Porras”. No es difícil imaginar el porqué de aquel melindre o remilgo. Y se dice que el desdichado rey, a quien la dignidad de la corona obligaba a permanecer impasible en los trances graves, se limitó a comentar: “Lo que molesta es la insistencia”.

La insistencia molesta a reyes y plebeyos. A nobles y villanos. Ad nauseam. Siento tener que decir que algunas cartas que se publican, es una opinión o apreciación personal y subjetiva, adolecen de originalidad. En ellas la amenidad brilla por su ausencia. Con ligeras variantes siempre vienen a decir lo mismo. Se repiten hasta la saciedad, hasta el hartazgo. Son más repetitivas que el ritmo del “Bolero” de Ravel. El cartautor parece que está haciendo méritos para ascender en el escalafón. Su parcialidad es manifiesta. Su partidismo, evidente. Y cae, si se me permite, en la monotonía de la cigarra macho canicular (lyristes plebeius). Lo digo sin acrimonia. Sin acritud. Bien sabe la rosa en qué mano posa...


3 comentarios:

Anónimo dijo...

La objetividad es un bien que escasea, lo lamentable es que la gente se contagie de la parcialidad de "periodistas amarillistas" y no piense por si misma. Lo que vende hoy en día son las opiniones extremas y personajes que rozan el ridículo por su subjetividad ( Sopenas, Jiménez Losantos... ); y a los que intentan ser coherentes se les agrede o se les tacha de "tibios" ( Blanco Valdés )

Anónimo dijo...

Mañan vai chover

Jose Q. dijo...

Siguiendo con el comentario de Miguel, apuntaría que la gente adopta y hace suya la parcialidad o subjetividad en las opiniones de algunos periodistas como los que ha citado u otros personajes mediáticos, entre otras cosas por la falta de cultura e información que les lleve a un razonamiento propio y a cuestionarse ciertas opiniones, la falta de realización intelectual y personal,conduce a la ausencia total de autocrítica y empatía, y por tanto a tomar el camino fácil de abrazar algunos postulados extremos defendidos por personajes tales como los que ha mencionado Miguel, sin preguntarse a donde lleva ese camino o si hay piedras en él. En lo que estoy en desacuerdo es con salvar de la quema a D.Roberto Blanco Valdés, si me parece una persona coherente, he leído y leo muchos de sus artículos y respeto su trabajo, aunque normalmente discrepo de sus opiniones, pero en ningún caso lo calificaría de "imparcial" u "objetivo" ,sino todo lo contrario(está claro que con menor intensidad que Sopenas y Losantos, ya que estos rozan el fanatismo), pero tanto el Sr.Blanco Valdés como el medio para el que escribe "La Voz", llevan un tiempo alejados de la "objetividad e imparcialidad", en casi todos los temas de actualidad en GALICIA, Decreto, Caixas, etc.